El presidente de la peña CEU-Manu Trigueros, José María Mira de Orduña, lo dijo claro: “Si no es porque Manu es como es, no hacemos nada”. Y es que los que conocen a Manu conocen su discreción, humildad, educación y cercanía. Estos valores, junto lógicamente a su indiscutible talento, son los que han llevado a este gran futbolista y persona normal a vivir una semana en la que ha acaparado todos los focos.

Empezó el sábado inaugurando una calle a su nombre en el pueblo de su padre, Herreruela de Oropesa. Ayer fue el turno de presentar su peña en el centro donde está a tres asignaturas de licenciarse en Magisterio. “Esto me da un poco de vergüenza, pero me hace feliz”, reconoce el embajador amarillo: “A algunos compañeros no les gustaba el fútbol y ahora son del Villarreal”. H