El Valencia, con más acierto que juego, se quedó con los puntos en un vibrante partido ante el Celta, que manejó el balón mucho mejor que el equipo local, pero al que su control del juego no le fue suficiente para sumar. No estuvo fino el Valencia, pero tuvo más ocasiones y al final, un penalti señalado a diez minutos de la conclusión del choque, protestado por el cuadro vigués, dio la victoria a los valencianistas.

Aunque en el segundo minuto de juego, Vezo envió un balón al poste de la meta de Rubén, el Celta controló el partido casi hasta el cuarto de hora, momento en el que el Valencia empezó a aproximarse más a la meta rival. Fruto de la mejoría local fueron dos claras ocasiones a la contra en las que los disparos de Carlos Soler y Gayà no surtieron efecto.

El Valencia sabía que su arma estaba en las contras y trataba de prodigarlas, pero no encontró el hueco para batir al meta rival, hasta que, precisamente tras el disparo de Gayá, llegó el 1-0, aunque fue en una acción a balón parado. El balón salió a córner tras el lanzamiento del lateral local y Zaza cabeceó magníficamente al primer palo el saque de Parejo a los 28 minutos de juego.

El gol sirvió para que el equipo gallego recuperara la pelota, aunque sus largas posesiones no iban acompañadas de jugadas claras de ataque, pues el Valencia cerraba bien los espacios.

El empate no llegó hasta los 45 segundos de la reanudación tras una recuperación de balón y un rechace que aprovechó Aspas para batir de cerca a Neto.

El balón, como en la primera mitad, era del Celta, que lo manejaba sin llegar a la meta de Neto, pero sin permitir que el Valencia hallara espacios al contragolpe, ya que los hombres de Marcelino García Toral estaban espesos.

Cuando más sufría el Valencia, una entrada de Pablo Hernández a Nacho Gil fue castigada con penalti y Parejo puso por delante a su equipo de manera definitiva.

Hugo Mallo y Iago Aspas, que estaban apercibidos de sanción, vieron la quinta amarilla y no podrán estar disponibles contra el Villarreal la próxima jornada.