El juvenil A del Villarreal CF brilló ayer en la vuelta de octavos de la Copa del Rey. A pesar de que el Málaga abrió el marcador en el minuto 10, fruto de su presión, el Villarreal fue directo a por la victoría. Tras varias tentativas, Darío igualó el choque en el minuto 31 gracias a un centro raso de Akale.
En el 48, Villa sentenció la eliminatoria, para desesperación del Málaga, y subió el 1-2 a su favor. Los locales se emplearon con dureza, pero con la expulsión de Castillo, Martín no perdonó y sumó el gol determinante en el 83, 1-3. H
