Comisiones Obreras (CCOO) ha cifrado el recorte del gasto público en España entre el 2009 y el 2014 en 78.164 millones de euros, el 8% del Product Interior Bruto (PIB) que se mantendrá si no se cambian las políticas seguidas hasta ahora. La inversión y las remuneraciones de los empleados públicos son los dos capítulos en los que el ajuste ha sido mayor, al tiempo que se ha producido una reducción de la plantilla de los empleados públicos, en los que se incluyen enseñantes y personal sanitario, de más de 136.000 personas.

El sindicato se va a dirigir a todos los partidos políticos para que se comprometan a recuperar el empleo público, hacer fijos a los trabajadores ahora interinos y así renovar las plantillas que soportan una alta tasa de envejecimiento. Al tratarse de empleo que ya existe, la medida no supondría un aumento del gasto, según CCOO.

El recorte analizado por esta central con datos de Hacienda y Administraciones Públicas, no se debe solo a las medidas impuestas desde Bruselas con motivo de la crisis económica, sino también a las decisiones de política fiscal en forma de reducción de impuestos sobre todo en los tramos más altos de la renta, que han tomado gobiernos de distintos color político, que han reducido en miles de millones los ingresos en las arcas del Estado.

AHORAN GASTAN LAS FAMILIAS

Manuel Lago, miembro del gabinete económico del sindicato y autor del informe, asegura que la crisis ha dejado claro que ha habido una "trasferencia de gasto" del Estado a las familias que son ahora quienes se deben hacer cargo, si pueden, de los gastos en sanidad, educación o servicios sociales. Esta situación se ha producido en todos los niveles de la administración sea estatal, local autonómica.

Tanto la inversión directa de todas las administraciones como las transferencias de capital para cofinanciar inversiones de otros la caída ha llegado a 40.569 millones de euros.

La remuneración de los empleados públicos ha retrocedido en 10.626 millones de euros, tanto por la devaluación salarial (el 5% en el 2010 y la congelación en los siguientes cuatro años) así como por el menor número de trabajadores.

LOS SERVICIOS

Además, el gasto sanitario se ha reducido en 9.600 millones de euros que ha afectado al personal sanitario por la bajada salarial y la reducción de plantilla, así como por la menor la inversión y la caída del gasto en medicamentos y en conciertos con hospitales privados.

En educación el recorte ha llegado a los 7.394 millones, (se han dejado de gastar uno de cada cuatro euros desde que empezó la crisis) con el mismo patrón que en el sector sanitario, menos salarios, personal e inversión. Sin embargo, el recorte apenas se ha notado en las subvenciones a la enseñanza privada ya que los conciertos con los colegios privados solo ha bajado el 1,2% entre el 2009 y el 2014.

También ha bajado el gasto en prestaciones sociales el 30%, algo más de 7.200 millones de euros.

Las inversiones en infraestrucuras del transporte han sufrido una merma de 10.789 millones.

EL DÉFICIT TARIFARIO

La pérdida de músculo del Estado desde el 2009 hay que buscarla en las pensiones, el pago de los intereses de la deuda y el gasto energético. En el caso de las pensiones la razón del aumento del gasto está en la demografía (más personas jubiladas con retas más altas) y el pago de la deuda en las obligaciones suscritas en la solicitud de créditos, que en el 2014 fue de 18.000 millones de euros más que en el 2009.

Sin embargo, los autores del estudio son más prudentes a la hora de valorar el gasto en energía, que según sus cálculos ha crecido casi un 500%. En todo caso si existe la sospecha de que las subvenciones y los pagos compensatorios al sector eléctrico, lo que se denomina déficit tarifario, habría supuesto un desembolso para el Estado cercano a los 6.000 millones de euros.