La crisis del coronavirus está pasando factura a la economía europea, y de manera muy notable al sector del automóvil. La Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (ACEA) ha establecido cuatro principios rectores para llevar a cabo un relanzamiento «exitoso» de la industria automovilística en la región europea, después de que la pandemia provocada por el covid-19 haya obligado a cerrar a la mayoría de las factorías. Entre estos principios se incluye la solicitud de medidas para estimular la demanda de toda clase de vehículos en los países europeos.

En un comunicado, el director general de ACEA, Eric-Mark Huitema, señala que, a medida que el viejo continente trata de reiniciar su economía, será «crucial» que el transporte por carretera «limpio» sea asequible «para todos», por lo que, a su juicio, serán necesarias medidas para ayudar a relanzar la demanda en todas las categorías de vehículos.

Otro de los principios que ACEA califica como esencial al respecto es la definición de una estrategia «coordinada» para relanzar la producción en las fábricas europeas de vehículos de forma «segura» y «lo antes posible».

«Una de las principales prioridades es proteger la salud de todos los que trabajan en el sector automovilístico. Para ese fin, necesitamos claridad sobre las normativas de salud y seguridad en cada país para cuando se reinicie la producción», subraya en ese sentido Huitema.

La asociación de fabricantes europeos de vehículos también ha pedido a la Unión Europea que acelere los procesos de homologación de vehículos así como el registro de los mismos una vez son comprados por parte de los clientes. El cuarto principio rector reclama también que se intensifique la inversión en infraestructuras de recarga eléctrica y reabastecimiento de combustible para garantizar que el parque de automóviles europeo pueda renovarse de manera respetuosa con el medio ambiente.

«Es interesante para Europa que este sector estratégico clave no solo se recupere, sino que también se revitalice para hacer una fuerte contribución a la estrategia industrial de la Unión Europea, así como al liderazgo mundial en innovación del continente», sentencia Huitema.

empleos / La Asociación Europea de Proveedores de Automoción y la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) calculan que unos 13,8 millones de europeos trabajan directa e indirectamente en la industria de automoción, y que, como consecuencia de la crisis sanitaria, más de 1,1 millones de empleados de los fabricantes de automóviles están ahora en situación de regulación temporal de empleo.

«Se estima que la pérdida de ingresos corresponderá a porcentajes de dos dígitos», explicaron recientemente las asociaciones, para quienes la incertidumbre «sigue siendo alta» en cuanto a la rapidez con la que el sector podrá recuperarse.