Europa nos ha escuchado. Seguramente, para muchos agricultores la reunión que el pasado 6 de septiembre mantuvimos los representantes de la Plataforma per la Dignitat del Llaurador con el director general de Sanidad y Seguridad Alimentaria de la CE, Bernard Van Goethem; no pasó de ser un acto protocolario. Pura cortesía y poco más.

Pero lo cierto es que, el primer paso importante de la Plataforma sea que nuestra voz se pudiera oír en Bruselas, fue de capital importancia que Van Goethem conociese y sin intermediarios, cuál es la realidad de agricultor castellonense, y cuáles son nuestras reivindicaciones más importantes. En definitiva: qué necesitamos de la UE para facilitar y mejorar el trabajo de los agricultores y, al mismo tiempo, reivindicar su papel en la actual sociedad. Y hablamos con claridad. Nosotros, por supuesto, estamos abiertos al libre mercado, porque nuestra agricultura vive, en gran medida de la exportación. Pero queremos competir con el resto de productores en igualdad de condiciones. Sin embargo, no podemos exigir a nuestras naranjas unos exhaustivos controles sanitarios y de calidad que, luego, no se piden a las que vienen de fuera, lo que no solo va en contra de los intereses de los consumidores, sino que ponen en serio peligro nuestras plantaciones por la transmisión de plagas. Todos debemos jugar con las mismas cartas.

Es necesario, y así se lo hicimos saber a Van Goethem, que se produzca, y de manera inminente, un aumento del control de las inspecciones de países terceros con personal de la Comisión Europea para garantizar que el libre mercado no suponga un riesgo para nuestros cultivos.

La Plataforma per la Dignitat del Llaurador está integrada por ayuntamientos y cooperativas de los municipios citrícolas de la provincia, la Federación de regantes y las organizaciones agrarias. Y el objetivo es uno y muy ambicioso: poner en marcha las medidas que ayuden a que el cultivo de cítricos vuelva a ser una actividad atractiva y rentable. Y para eso es necesario llamar la atención de la administración regional, nacional y europea, para lo que hemos realizado una recogida de firmas entre la sociedad civil que le entregamos al director general de Sanidad y Seguridad Alimentaria de la CE. Queremos que todos se involucren en la defensa de nuestros cítricos, que es una forma de defender a nuestros agricultores y lo que somos.