el ejercicio 2016 está siendo especialmente duro para las entidades financieras. Los bajos tipos de interés y el aumento de la competencia están influyendo decisivamente en la reducción del volumen de negocio y, sobre todo, en la contracción de los resultados obtenidos en el conjunto del sistema financiero español.

Sin embargo, el Grupo Cajamar continúa mostrando síntomas de arraigo, fortaleza y solvencia en un contexto tan complejo tanto en la Comunitat Valenciana como en el conjunto de España. El líder de la banca cooperativa en España, donde ya tiene presencia en 42 provincias, mejora en aspectos tan relevantes de la cuenta de resultados como recursos gestionados e inversión crediticia sana, frente a la caída generalizada que se registra durante el primer trimestre de este año en la mayoría de entidades de la competencia.

Lo mismo sucede con el crecimiento interanual de la cuenta de resultados, que anota un aumento superior al del sector en los márgenes de intereses, bruto y de explotación. Es cierto que, sin embargo, el resultado final sí crece menos, pero se debe, además de al aumento de las coberturas regulatorias, a una estrategia responsable y libremente asumida de aumentar la solvencia y la sostenibilidad de su modelo de banca cooperativa a largo plazo, a través de una política extremadamente prudente en cuanto a coberturas voluntarias.

EFICIENCIA Y RENTABILIDAD

En términos de negocio, a 31 de marzo el Grupo Cooperativo Cajamar obtiene un crecimiento positivo del 0,4% frente al comportamiento negativo del sector del -1,3%. Lo anterior responde a un aumento en los recursos gestionados del 1,2%, tanto en depósitos convencionales como en fondos de inversión, planes de pensiones, seguros de ahorro y cartera de clientes. El volumen de depósitos minoristas se ha incrementado un 0,9% durante el primer trimestre, mientras que los del sector retroceden un 0,8%. Finalmente, también se ha registrado un mejor comportamiento en lo que se refiere a la evolución de la inversión crediticia sana, con un aumento del 0,2% frente al -1% del sector.

En resumidas cuentas, con tipos de interés en tasas negativas y perspectivas nada claras sobre el futuro del sector a corto plazo en nuestro país, el Grupo Cajamar ha conseguido contener la caída de los márgenes de beneficio que registra el conjunto de la banca española desde hace meses. De esta forma, y a pesar de la reducción de ingresos por comisiones por encima de la media, el margen bruto recurrente, el propio del negocio bancario, ha disminuido en mucha menor medida que el del sector (-0,8% frente a -1,7%).

En el apartado de gasto por empleado es donde el Grupo Cajamar aumenta sus ratios, lo que hace, por ejemplo, que la comparativa con el resto de entidades sea bastante llamativa en términos de eficiencia (68,5% frente a 57,4%), y con crecimientos interanuales mayores (2,19% contra 1,16%).

SINGULARIDAD DEL SERVICIO

La singularidad del servicio especializado y la capilaridad de la red comercial del Grupo por todo el territorio determinan que la productividad aparente por empleado y oficina representen solo el el 61% y el 46,8% de las del sector, respectivamente. Sin embargo, en el ámbito de la realidad cotidiana de los sistemas productivos no se trata de falta de eficiencia real, sino de la casuística propia de un modelo de relación con sus socios y clientes que mantiene un alto número de sucursales, centrado en la atención a pymes y familias, y que pone la rentabilidad social por encima de las estadísticas. H