Lucía Fayos, veterinaria y propietaria de Assisvet Veterinària, ubicado en la plaza Bucarest, de la capital de la Plana, comenta que “desde el decreto del estado de alarma seguimos al pie del cañón todos los días, dando servicio a nuestros clientes aunque con un horario algo más ajustado”. “Nos preocupamos por los clientes, por su salud y la nuestra, y es por ello que hemos establecido una serie de pautas a seguir como son la de no acumular a gente en la clínica o pedir que los propietarios vengan con guantes y mascarilla en la medida de lo posible”, destaca Fayos, quien además añade que “la situación ha cambiado y es por eso que los protocolos también tienen que hacerlo para ajustarnos a la realidad de hoy en día”. Por otro lado, “hemos donado material a la sanidad pública cuando nos lo han requerido. Por eso, si se nos considera esenciales, creemos que nos merecemos un reconocimiento público y que se nos escuche porque tenemos mucho que aportar y más cuando de una pandemia de estas características se trata”, afirma Fayos, quien aprovecha para lanzar un mensaje de ánimo y esperanza para todos los castellonenses, ya que “el final está más cerca y el espíritu de unión y solidaridad demostrado por muchas personas nos hace más fuertes y eso es la mejor solución para combatir este covid-19 que tanto daño nos está haciendo”.