Tras tres días de polémica, Miquel Iceta quiso guardar en el cajón su propuesta de indultos para los líderes independentistas que sean condenados, una iniciativa «prematura», que zanjó tras el malestar que ha generado en el PP y el PSOE su planteamiento. Los últimos en afearle la idea han sido Mariano Rajoy y Josep Borrell. El presidente español cree que «no tiene ningún sentido» hablar de ello, mientras que el exministro, más comprensivo en su debut en la campaña del PSC, sentenció que «antes de cerrar heridas hay que desinfectarlas».

Desde Bruselas, donde ha participado en el Consejo Europeo de diciembre, Rajoy recordó que el Gobierno fue «enormemente restrictivo» a la hora de conceder indultos y «sobre todo», añadió, en el caso de políticos. El líder del PP consideró prematuro hacerlo cuando «ni siquiera ha habido citación ni resolución ni petición de indulto». Eso sí, aseveró que en Cataluña está actuando como quiere «la inmensa mayoría de la sociedad española», informa Pilar Santos.

«Sin duda, se trata de una propuesta prematura y aquí debe quedar eso, pero me comprometo, si soy presidente, a tomar todas las decisiones y emprender todas las iniciativas que favorezcan la reconciliación», justificó Iceta en el informativo Fòrum Europa Tribuna Cataluña, antes de ir a Hospitalet, donde le acompañó Borrell. El exministro, cara visible del PSC en la manifestación del 8 de octubre de Societat Civil Catalana, entraó fuerte en la campaña. «Miquel, tú les quieres perdonar enseguida porque eres muy buena persona. Yo no soy tan buena persona. Está muy bien querer cerrar las heridas pero antes hay que desinfectarlas».

El expresidente del Parlamento Europeo volvió a demostrar que es una de las voces del socialismo catalán más críticas con el independentismo. En su intervención cargó no solo contra los partidos soberanistas, sino también contra los medios de comunicación públicos, que considera fábricas de secesionistas. «Si solo viera TV-3 hasta yo sería independentista. Por suerte no la veo», soltó antes de volver a proponer en este ámbito «desinfectar y luego coser».

LA ‘CARTA DE BORRELL’ / El PSC reservó para el final de la partida electoral la carta Borrell. El exministro, pese a haber rechazado ir en el número 3 de la lista porque ya no aspira a cargos representativos, decidió implicarse a fondo en la campaña y tendrá a partir de ahora agenda propia. No olvida Borrell cómo Iceta le ayudó hace dos décadas a recabar apoyos para ser elegido candidato del PSOE a la Moncloa en 1998: «Estoy muy contento de devolverle la ayuda para intentar contribuir a un Govern que nos saque del agujero».

Iceta le presentó como «la persona que más ha hecho para desmontar el argumentario independentista». «Nos hace reflexionar a los otros si hemos hecho suficiente», añadió. El candidato del PSC confía en que la vehemencia del azote del soberanismo sirva, no solo para «seguir desmontando mitos», sino para convencer a los indecisos que se debaten entre el PSC y Ciutadans, una formación con la que Borrell reclamó ya antes de las próximas elecciones «no cerrar ninguna puerta» tras el 21-D.