Silvia Cantavella recibió a principio de año la noticia de que iba a ser la máxima representante de las fiestas, cargo que se formalizó hace unas semanas en un emotivo acto en el Auditori. Silvia es, a sus 20 años, estudiante de Enfermería y Podología en la Universidad Católica de Valencia. La joven conoce bien las fiestas ya que sus padres forman parte de la peña El Balconet y ella es integrante de la peña Xaloc. También está vinculada a la Asociación de Hijas de María del Rosario y es músico de la Unió Musical La Lira.

--¿En qué momento decides presentar una candidatura para ser la máxima representante festiva?

-Desde pequeña me había hecho ilusión y mi sueño era vestirme como las chicas que iban encima de las carrozas. Mi madre todavía me lo recuerda y por eso me apuntó a bailar en el grupo de bailes tradicionales de las rosarieras. Allí coincidí con dos compañeras que fueron damas en el año 2012 y las ganas de formar parte de la corte aumentaron todavía más.

--¿Qué te parece el modelo de fiestas de Vila-real?

-De la semana de fiestas no cambiaría demasiado porque tiene actos para todas las edades y gustos. Para mí, nuestras celebraciones son tradición y están dedicadas a los dos patrones. Las ofrendas, las misas y el resto de actos religiosos son importantes, aunque mucha gente tiende a olvidarlo.

--Ha pasado uno de los actos, el Pregón e imposición de bandas que las diferentes representantes de las fiestas viven con mayor intensidad. ¿Cómo lo recuerda?

-Durante todo el día tuve muchos nervios pero cuando llegó el momento me invadió la emoción. La verdad es que ver a toda mi familia, amigos y vecinos de mi calle allí cuando vinieron a recogerme fue, la verdad, un orgullo muy grande.

--Ya has vestido en un par de ocasiones la indumentaria tipica. ¿Resulta complejo el proceso?

-Por ejemplo, si quedamos a las 10:30 hay que levantarse a las 07:30 para peinarnos, maquillarnos, vestirnos... Hay que tener paciencia y siempre mirando que no se te olvide nada.

--Una de las costumbres antes de las fiestas es llevar huevos a Santa Clara para pedirle buen tiempo estos días. Comentasteis que había pasado alguna cosa, ¿se puede compartir?

-Sí. Cuando llegamos a la basílica se puso a chispear un poco y las madres estaban todas preocupadas y decían que qué pasaría ahora pero nada grave [ríe].

--Por ahora, ¿qué tal la relación con tus compañeras?

- Va de maravilla. Somos diferentes, cada una es de una forma de ser pero gracias a eso aportamos cosas diferentes al grupo.

--¿Qué actos del programa esperas con mayor ilusión?

- Uno es la visita al centro de Alzhéimer, la espero con mucha ilusión, y también el día del homenaje al hombre y a la mujer más mayores. Son actos que quizá la gente no conoce pero cuando lo haces, descubres que son muy emotivos y bonitos.

--Uno de los inconvenientes que se plantea para ser candidata es el alto coste para ejercer el cargo. ¿Qué opinas?

-Obviamente hay gasto, pero la cantidad que quieres. Hay telas caras y otras más económicas y muy bonitas sin que haga que vayas más o menos guapa. La verdad, animo a las jóvenes a que no lo duden porque, por lo poco que hemos vivido hasta ahora, sé que me espera un año inolvidable

--Un mensaje para animar a vivir estas fiestas...

-A los vecinos de Vila-real y de otros municipios que puedan acercarse, les invito a que vengan y participen de las fiestas porque incluye actos abiertos a todos. h