Califica de “orgullo” ser presidenta de la Junta de Camareras de la Real Cofradía de la Mare de Déu del Lledó, “con una gran responsabilidad, pero soy feliz”. Así se expresa Laura Albiol Varella, titular del grupo de mujeres que se encargan de vestir, adornar y cuidar la imagen de la patrona de Castellón.

Un trabajo desinteresado realizado con cariño y esperanza para que el icono mariano más venerado de la ciudad luzca con todo su esplendor ante la llegada de las fiestas patronales del 2016.

Y es que, como indica Laura Albiol, “es impresionante el cariño y la devoción de los castellonenses hacia la Lledonera”. En su posición privilegiada es testigo de cómo los fieles muestran su devoción a una virgen que encierra los anhelos, los deseos y la fe de un Castellón desde la vertiente católica, pero también desde el arraigo popular de leyendas transmitidas de padres a hijos y nietos, muy al margen de la propia catolicidad y cristianismo.

Albiol cita los pasos de manto, las eucaristías dominicales o los días intensos en los que en cada momento, en cada instante, siempre hay un momento de oración y plegaria hacia la Virgen.

Inmersa en la preparación de los últimos detalles de los festejos patronales, Laura Albiol destaca que las fiestas “van a ser como todos los años, aunque con algunas novedades como el concurso de fotografía o el bureo que organizan todos los grupos folclóricos de la ciudad el viernes (hoy para el lector) en la explanada de la basílica”. Por otra parte, solo tiene palabras de elogio hacia el apoyo y la colaboración del Ayuntamiento, “que se está implicando mucho en las fiestas patronales”.

La presidenta de la Junta de Camareras espera expectante el domingo, fiesta principal de la Mare de Deú del Lledó, una jornada especial en la que el pueblo de Castellón se vuelca en cada uno de los actos, y especialmente en la procesión general, y cita el trabajo intenso de los miembros de la junta de gobierno: “Realizan una gran labor”. H