Definidos por su finura, sencillez, gran sabor, aroma y acogida, los Marina Espumante se convierten en los auténticos protagonistas de la gastronomía de estas señaladas fechas. Tanto en aperitivos, como platos de arroz, carnes, pescados o como simple refresco, estos vinos maridan a la perfección con cualquier tipo de plato, al tiempo que resultan idóneos para los que se quieren iniciar en la enología.

Fue en el año 2008 cuando desde Bodegas Bocopa se decidieron apostar por los espumosos. El primer producto fue Marina Espumante 7º, que cosechó gran éxito y, de hecho, es el que cuenta con mayor número de ventas.

En vista de la buena acogida, «nacieron en 2012 los Marina Espumante Brut y Marina Espumante Rosado. Finalmente, en 2013, se lanzó el último, Marina Espumante Tinto», indican desde la empresa. Además, cada uno de estos productos «sorprende por el packaging, diferente, llamativo y divertido», con unos trazos muy singulares y vivos y que, además, recuerdan a la zona costera, donde se cultivan las uvas que tienen de base.

La principal diferencia de estos vinos con respecto a otros es su personalidad, que se basa en su propio origen. «Las uvas de moscatel de Alejandría que usamos para el Marina Espumante y las uvas Monastrell con las que elaboramos Marina Espumante Rosado y Marina Espumante Tinto son diferentes a cualquier uva utilizada en vinos espumosos.

Son uvas que seleccionamos especialmente y que solo se pueden encontrar en la provincia de Alicante». A esto cabe añadir que «estos espumosos se elaboran de manera totalmente natural, por medio del método charmat, un modo que se basa en la fermentación en grandes cubas y con el que se buscan producir unos vinos más frescos, joviales y de consumo más rápido», concretan desde Bocopa.

Un maridaje perfecto

Esas condiciones naturales y la versatilidad de los espumosos hacen que resulten ideales para maridar con cualquier tipo de comida. Así, desde la bodega alicantina sugieren que para la recepción de los invitados a una cena o comida de Navidad se utilizaría el «María Espumante 7º, abriendo el apetito con simpatía».

Resulta «idóneo para aperitivos y para comidas ligeras y postres». Cabe destacar, además, que este espumoso «solo tiene un 7% de graduación alcohólica» y que supone «una deliciosa y sorprendente elección para aquellos aficionados al vino que quiere probar algo diferente y, cómo no, para aquellos que desean iniciarse en este mundo». No en vano, desde su lanzamiento ha conseguido más de 30 premios nacionales e internacionales.

Pasando ya al menú navideño, para un primer plato recomiendan el uso del Marina Espumante Brut, «nuestro espumoso más seco, para maridarlo con jamón ibérico y ostras. Para un plato principal, como la carne con salsas especiadas, desde Bocopa recomiendan el Marina Espumante Tinto, que también mezcla con «tapas, arroces ligeros y quesos». Si se prefieren carnes blancas, se deberían acompañar con el Marina Espumante rosado, que también se puede usar para el postre, ya que se trata de «un vino fresco, alegre y juvenil que invita a la fiesta».

Así, los Marina Espumante «son vinos para tomar en cualquier momento y acompañando a cualquier propuesta gastronómica». Además, sus «finas y rápidas burbujas» son capaces de atraer «a la gente joven al mundo del vino», aportando «sensaciones de felicidad, alegría y fiesta».

Asimismo, sus variedades en formato mini están siendo altamente demandadas como regalos para eventos, sobre todo bodas o celebraciones. «Este año hemos batido récords con la cantidad de minis que hemos vendido para celebraciones» aseguran desde Bocopa.