Arte y devoción. Exaltación de la Virgen María en todos sus misterios y dogmas: asuncionista, concepcionista, de redención, de mayor dolor y traspaso, de piedad y soledad, de gracia y esperanza, mediadora y auxiliadora, protectora, de paz y de reconciliación, de misericordia... Y Reina de los Apóstoles, de los Santos y de los Ángeles.
Ese es el leit motiv del retablo del altar mayor de la concatedral neogótica de Santa María de la Asunción de Castellón, y que está realizando por fases Traver Calzada, uno de los artistas más emblemáticos de la provincia, y cuyo estilo hiperrealista cautiva por su autenticidad, nobleza de trazos y simbolismo figurativo en la encarnación de personajes reales y ficticios que hablan de historia, cultura, tradición y acervo popular. Más todavía, cuando se refleja en una temática religiosa entroncada con los ancestros de un pueblo, de una provincia.
El vicepresidente de la Diputación y diputado delegado de Cultura, Vicent Sales, ha visitado el taller del pintor para conocer de primera mano el estado del conjunto pictórico que conforma la segunda fase del proyecto, «con un convenio de de colaboración, que llevará a la Diputación a subvencionar la adquisición de las dos obras: Madre, he aquí a tu hijo y Estos son mi madre y mis hermanos mediante una inversión cercana a los 80.000 euros», como explicó Sales. Una inversión que «se encuadra dentro de la política de divulgación del patrimonio provincial», reiteró el diputado provincial delegado de Cultura.
La tercera fase abarca las obras Visitación de la Virgen María a Santa Isabel y Descendimiento y Piedad. La cuarta, Genealogía de Jesús-árbol de Jesé y Adoración de los Pastores, y la quinta, Nacimiento de la Virgen María y Bodas de Caná. Un diseño que recorre la vida y la obra de Santa María, y como veneración de todos los castellonenses.
Legado y patrimonio
«Castellón es una tierra construida sobre un legado y un patrimonio rico y variado, al que si le sumamos el talento de nuestros artistas nos permite contar con un reclamo artístico y cultural inmejorable y un nuevo motivo para sentirnos orgullosos de vivir en esta provincia», destaca el vicepresidente de la institución provincial a la hora de justificar esta inversión que une la fe y la devoción de un pueblo en un compromiso también «con la capital de la provincia, que mejorar su patrimonio histórico y cultural, y especialmente el de su Concatedral plenamente recuperada para la fe cristiana».
«Contribuimos a dotar con una obra emblemática a un lugar referente en la provincia, como es la Sede Matris castellonense, la cabecera eclesiástica de la diócesis bicéfala de Segorbe-Castellón», como se encarga de recordar el presidente de la Diputación, Javier Moliner.
«Entendemos que la cultura tiene una serie de valores que entroncan perfectamente en el orgullo de pertenencia de la gente, desde la valoración y el disfrute y el ocio de los ciudadanos», incide Moliner. Pero, «también como gran atractivo turístico, de hecho hay mucha gente que nos conoce por nuestro patrimonio, nuestra historia y capacidad que hemos tenido que ponerlo en valor a la hora de apostar por la cultura en sus distintos ámbitos, y la Diputación tiene que ser la piedra angular a toda esa difusión y aprovechamiento de las oportunidades que de la cultura se derivan a nuestros pueblos», argumenta el titular de la corporación provincial.
