Una montaña rusa, un torbellino y un auténtico abanico de emociones. Así define Paco Román, cantante y guitarrista de Neuman, su banda, que viene pisando fuerte desde el lanzamiento del primer álbum. En 1999 el vocalista decidió emprender un proyecto personal e intimista, que se adentrara en lo más profundo de su ser. Casi 20 años después, Neuman ha logrado conquistar al público de los festivales y ciclos musicales de toda España. Esta tarde será el turno de los sounders del Arenal de Burriana, donde actúan a las 18.40 horas en el Negrita.
--¿Cuál es la esencia del grupo?
--Neuman se caracteriza por su gran cantidad de géneros de contraste y por unas melodías que representan emociones muy dispares. Es un torbellino, porque hay canciones que arrancan solo con el sonido del piano y la voz y, de repente, la batería las inunda de una fuerza increíble.
--No es la primera vez que actúa en el Arenal. ¿Cómo fue la experiencia en el 2015?
--Me acuerdo que tocamos un domingo. Estuvo muy bien, aunque ese día llovió bastante. Este año, aunque volvemos con el mismo disco, estamos deseando tocar en el festival.
--En septiembre publican su cuarto álbum, ‘Crashpad’. ¿Cómo surgió el nombre?
--Surge de la sensación que he tenido a lo largo de todas las grabaciones y giras. Crash pad significa un sitio de una sola noche, lo contrario a tu guarida. Pero ahora, en Granada, ya tenemos nuestro estudio, por lo que no hay más crash pad. Además, es el disco que mejor nos define.
--¿Qué otros proyectos tienen entre manos ahora mismo?
--A partir de octubre tenemos pensada una gira por las salas de España. Estaremos en Madrid, València, en la sala Apolo de Barcelona y en Zaragoza.