El Gobierno alemán presentó hoy una estrategia conjunta para prevenir el extremismo político y religioso y fomentar la democracia, siguiendo una recomendación de la comisión parlamentaria que investigó los crímenes de la banda ultraderechista Clandestinidad Nacionalsocialista (NSU). La estrategia, presentada por el ministro de Interior, Thomas de Maizière, y la ministra de Familia. Manuela Schwesig no apunta sólo a la ultraderecha sino también al extremismo de izquierdas y al fundamentalismo religioso.De Maizière dijo al presentar el plan que en todos los casos de jóvenes que caen en el extremismo de cualquier tipo se da un caldo de cultivo similar. "El modelo siempre es parecido, se trata de jóvenes con identidades débiles, desorientados ante el mundo moderno y con experiencias de fracaso", dijo el ministro.

De Maizière recordó además que el programa se llama "Fomento de la democracia y prevención del extremismo" y que el fomento de la democracia no va contra una u otra forma de extremismo sino contra el caldo de cultivo de cualquier tipo de extremismo. Schwesig, por su parte, dijo que los fondos del programa se repartirán de acuerdo con las iniciativas ciudadanas que existan y de acuerdo con las necesidades de las regiones. "No tiene sentido que tomemos una decisión ideológica y digamos que vale tanto para prevenir el extremismo de derecha, tanto para prevenir el de izquierda y tanto para prevenir el salafismo". dijo. "Hay grandes ciudades que tienen problemas con la ultraizquierda, como ocurre en algunas partes de Berlín, regiones rurales donde el principal problema es la ultraderecha y en el oeste hay un problema con el salafismo. Tenemos que ver qué iniciativas hay en cada caso y apoyarlas", dijo. La idea central de la estrategia es apoyar iniciativas locales para apoyar la democracia y tender puentes para llegar a jóvenes propensos a caer en el extremismo. Parte del plan es llegar a las cárceles donde muchos jóvenes que han incurrido en algún delito son seducidos por predicadores salafistas. "Es una diferencia si esos jóvenes encuentran en nosotros un interlocutor o si lo encuentran en los salafistas", dijo Schwesig.