El pasado noviembre se detectaron 13.500 cruces de frontera irregulares en las cuatro rutas migratorias hacia la Unión Europea (UE), un 27% menos que hace un año, según los datos publicados el lunes por Frontex, la agencia de control de las fronteras de la UE. La cifra total de migrantes detectados en estas rutas en los primeros 11 meses de este año fue de 186.500, lo que supone un 62% menos que en el mismo periodo en el 2016.

El número de migrantes que llegaron a Italia a través del Mediterráneo central en noviembre cayó una décima parte desde el mes anterior y fue de 5.300. Este descenso se debe al empeoramiento de las condiciones climatológicas, siguiendo así el habitual patrón estacional. El número total de llegadas a la UE por esta ruta durante los primeros 11 meses del 2017 fue de 116.400, un tercio menos que en el mismo período del año pasado. Los nigerianos constituyeron el mayor número de inmigrantes llegados a Italia de forma irregular en lo que va de año: representan uno de cada siete. Les siguen ciudadanos de Guinea, Costa de Marfil y Bangladés.

En España sigue produciéndose un alto nivel de llegadas irregulares de inmigantes: 3.900 lo hicieron en noviembre, más de tres veces la cifra del año anterior. Constituye también la cifra mensual más alta detectada desde que Frontex comenzó a registrar los datos en el 2009.

Más de la mitad de estos inmigrantes son ciudadanos de Argelia y Marruecos. Según Frontex, las cifras de inmigrantes procedentes de estas comunidades ha ido al alza desde mediados de este año. El resto de los inmigrantes que usaron la ruta del Mediterráneo occidental procedían del oeste de África. Entre enero y noviembre, se detectaron más de 21.100 cruces irregulares en esta región, un 140% más que en el mismo periodo el pasado año.

Estado del mar

El número de inmigrantes llegados de forma irregular a Grecia en noviembre fue de 3.700, una caída del 30% del ritmo mensual. Frontex atribuye este descenso al estado muy agitado del mar en la segunda parte del mes. En los primeros 11 meses de este año, más de 37.900 inmigrantes pasaron por la ruta del Mediterráneo oriental, un descenso del 79% sobre el mismo periodo del 2016. La mayoría de quienes fueron detectados en esta ruta son ciudadanos de Siria, Irak y Afganistán. El número de inmigrantes irregulares detectados en la ruta de los Balcanes fue relativamente bajo en noviembre: unos 500.