Fadrell es una de las partidas más importantes de la ciudad y con más solera y tradición, que se caracteriza por ser un barrio de labradores. De hecho, en el término que lleva su nombre se levanta, como la gaiata en la semana grande, la ermita de Fadrell, dedicada a Sant Jaume, y que este año ha tenido una importancia especial porque acogió el primer acto festero de presentación de los nuevos representantes del 2020. Fadrell también daba nombre a un poblado que, antaño, se levantó en las inmediaciones de este recinto religioso.

Es un sector céntrico que lleva las fiestas en las venas y en el corazón. Aunque en un principio recibió el nombre de sector de la plaza de la Paz y adyacentes, ahora se llama Fadrell e incluye también las calles Ximénez, Guitarrista Tárrega, Moyano, Bartolomé Reus, Luis Vives --donde hoy en día todavía se conserva la conocida como la Casa de la Bombilla-- o Temprado. Entre sus vecinos ilustres destacan el Teatro Principal, en la plaza de la Paz; y hace años, el cine Rialto --extinto cine de la Paz, conocido por el terrible incendio que lo asoló en noviembre de 1918-- y el Rex, hoy también cerrado. Fadrell ha sido testigo fiel de la historia de la ciudad de Castelló, ya que por algunas de sus calles discurrió la tradicional Panderola y acogió el Banco de España --en la actualidad son oficinas del Gobierno Central en la capital--. Y, cómo no, la gran mayoría de los vecinos recuerdan la escultura del labrador en la plaza Fadrell, que también acoge, recordando a este sector agrícola, el conocido mercado de la naranja donde los pequeños productores ponen a la venta sus productos cada domingo en plena temporada citrícola. Y es que en esta plaza, hace años, era donde anaven a llogar-se --igual que sucedía en el entorno de la plaza Isabel la Católica-- los trabajadores para el campo.

Este sector aglutina, asimismo, parte de la avenida Casalduch, el parque del Peri 18, con su lago y sus patos, y la avenida Chatellerault, zonas por donde se ha expandido la ciudad.