Nuestras mascotas ofrecen importantes beneficios tanto para las personas como a la propia sociedad. Sin embargo, debemos ser conscientes de que la presencia de excrementos en los espacios públicos puede originar problemas entre diversos sectores de la población.
El Ayuntamiento de Castelló ha llevado a cabo en este mandato campañas de concienciación ciudadana para que los dueños de perros recojan las deposiciones de sus mascotas de la vía pública y ha impuesto entre el 2015 y el 2018 un total de 246 sanciones por depositar heces de mascotas. Además, ha introducido mejoras en el contrato de limpieza con el objetivo de dar respuesta a la suciedad por heces.
Pero debemos entender que recoger los excrementos de los perros es necesario, es un gesto que hay que hacer por educación y respeto a todos los que vivimos en esta ciudad. También por cuestión de salud y percepción de la imagen del municipio, tanto desde el punto de vista estético como del turismo, hay que evitar la suciedad en la vía pública.
Si queremos un Castelló amable y próspero, todos tenemos que colaborar. La administración la primera, pero los ciudadanos también. Es necesario contar con la implicación y el compromiso de vecinos y vecinas para mantener limpia la ciudad.
Me parece importante que sepan que en Castelló en solo cuatro meses hemos llegado a retirar hasta 9.000 excrementos de mascotas de la vía pública. Esto indica que la limpieza es necesaria, pero no la solución definitiva. El civismo es la parte más importante para reducir la suciedad por deposiciones. Si todos los dueños de mascotas cumplen con su deber de recoger las heces, parte de los recursos destinados a esta acción podrían dirigirse a otras cuestiones para seguir mejorando la ciudad.
*Concejala de Salud Pública del Ayuntamiento de Castellón
