Desde el confinamiento el pasado mes de marzo, hemos ido encadenando una serie de noticias que a cual peor: aumento exponencial de contagios y muertes por culpa del covid-19, destrucción de empleo, ERTES, economía en descenso. . .

Las noticias se iban consumando y había que adaptarse a una nueva situación que nadie se esperaba: suspensión de las fiestas de la Magdalena 2020, suspensión de la Semana Santa 2020, suspensión de las fiestas de San Pedro 2020, el curso escolar 2019/2020 se suspendía presencialmente y los alumnos tendrían que terminar su curso desde sus casas en una situación para la que no estamos preparados: brecha digital en muchas familias, sin poder acceder a ordenadores ni mucho menos aún dar clases telemáticas online , colegios no preparados para dar clases online , padres que tenían que compaginar teletrabajo con colegio, . . .

Y los días iban pasando, y las semanas iban pasando, y los meses iban pasando . . .

Pero cuando desde la Federación Española de Fútbol tienen claro que se decide dar por finalizada la temporada con el CD Castellón como primer clasificado del grupo tercero de la 2ª División B, y el ascenso a Segunda División A se decidirá por un play off exprés a partido único y tras la celebración del sorteo, emparejar al C D Castellón contra la U D Logroñés el 18 de Julio, esa fecha se marcaría en el calendario de los orelluts y de nuestra ciudad.

Se es consciente de que hemos atravesado y estamos atravesando una situación excepcional que en nuestra historia nunca había ocurrido, y esta pandemia marcará nuestras vidas para siempre pero dentro de las noticias malas la gente se aferra a algo, a alguna noticia buena que, por lo menos, por unas horas, por unos días, te haga pensar en algo bonito y positivo, que, como decía mi padre «las noticias malas ya vienen por sí solas».

Como dice la letra del himno del CD Castellón, «en el escudo de tu historia . . .».

Una historia que nos ha estado golpeando y golpeando día tras día desde marzo, pero que deseábamos que a nivel deportivo nos merecíamos que esa historia empezara a poner al club en el sitio que se merece.

Además, con este verano atípico, donde en nuestros barrios y nuestras asociaciones hemos dejado a un lado su impulso y espíritu de convivencia y participación, y hemos tenido que suspender sus fiestas patronales. Unas fiestas que durante décadas, en muchos de estos barrios jamás se habían suspendido. Pero cuando se pone en la balanza la sanidad de las personas, no hay que pararse ni a valorar la situación y ya vendrán otros años en los que poder disfrutar de las fiestas.

Verano atípico porque un 18 de julio el CD Castellón, consigue, por unas horas paralizar una ciudad y una provincia durante el encuentro de promoción de ascenso a la Segunda División A del fútbol español y se vuelca para intentar conseguir el objetivo de regresar al fútbol profesional que, desde hace 15 años, contra el Zamora, no se conseguía.

Pero no hubo suerte este 18 de julio, y había que gastar los dos cartuchos en la recámara de los que disponíamos, porque el CD Castellón está encaminado a sufrir.

La ciudad y la provincia continuaban con la lucha contra el covid-19, pero jueves 23 y domingo 26 de julio se veían en el horizonte. Y así fue, primero el jueves 23 de julio, cuando el equipo se deshace del Peña Deportiva de Ibiza y deja como final el domingo 26 de julio contra el Cornellá.

Volvíamos a tener otra oportunidad para hacer felices a las y los castellonenses, a su ciudad, a su provincia, con un ascenso a la categoría de plata del fútbol español más que merecida porque este club y esta ciudad se lo merecían.

Estamos pasando un año 2020 muy malo. Con una pandemia que nos ha dejado muy tocados, pero el Club Deportivo Castellón, con su directiva, jugadores y cuerpo técnico, han conseguido arrancar a los castellonenses unos días inolvidables, dejando de lado por un momento el amargo sueño por el que vivimos uno y otro día, esperando que una buena medicación o una vacuna vayan venciendo el covid-19.

Esperamos que no se quede aquí la cosa, y que el año de nuestro centenario, 2022, podamos estar en la categoría de oro, que es donde se merece el club y su afición, una afición que siempre ha sido fiel, demostrando año tras año en sus periplos por los campos de categorías inferiores como 3ª o 2ª B que ser albinegro es una pasión. Y seguir escribiendo en la historia del club, y en su escudo, días de gloría.

Este ascenso es de un club, de una ciudad, de una masa social incansable. Pero este ascenso también es de todos aquellos castellonenses que durante esta pandemia han perdido la vida, de los enfermos que han superado y están superando la enfermedad, y de los familiares que han sufrido en sus carnes historias que jamás hubieran deseado. Por ellos, por todos: PAM PAM ORELLUT! H

*Presidente de la Federación Coordinadora de Entidades Ciudadanas de Castelló