Obras son amores… y no buenas razones. Lo primero que se encontró el Partido Popular al llegar al gobierno en 2012 fue un agujero en el Ministerio de Fomento de 40.000 millones. El gobierno socialista, entre 2005 y 2011, había disparado el endeudamiento en 14.000 millones de ADIF --ni un euro para el AVE a Castellón, ni el corredor mediterráneo--; 14.000 millones de AENA -para el aeropuerto de Castellón, ni un euro- y 5.700 millones en la red de carreteras del Estado -ni la A-7, ni la CV-10, ni el desdoblamiento de la N-340, ni la A-68-. De los 40.000 millones, no sufran; aquí en nuestra provincia los socialistas no habían dejado ni un chavo.

Los ciudadanos de Castellón observamos en 2004, cuando José Luis Rodríguez Zapatero presumía de que la economía española estaba en la Champions League de la economía mundial, como las inversiones socialistas miraban hacia otras tierras. Y luego, a partir de 2007, seguimos observando con la misma desesperación que en tiempos de apreturas y de contención en el gasto público, eran las inversiones en nuestra provincia las primeras que caían de los proyectos socialistas. Así ocurrió con el AVE, cuando con las obras licitadas y adjudicadas, decidieron suspender su ejecución.

En ocho años, ni un euro por parte del gobierno socialista en unas infraestructuras vitales para nuestro futuro económico. Porque sin ellas nuestra economía no puede ser competitiva y sin ellas perdemos el importante tren del futuro.

Por el contrario, ¿qué han hecho los gobiernos del Partido Popular? Pues invertir 83 millones en la variante de la N-340 entre Peñíscola, Benicarló y Vinaròs; invertir 171 millones en la conexión AVE entre València y Castellón; invertir 335 millones en el eje ferroviario Sagunto-Segorbe-Teruel; invertir 42,1 millones en la N-232 en Morella, en el Barranco de la Bota, para eliminar más de 60 curvas e invertir 199 millones en el corredor mediterráneo en el tramo entre Castellón y Vandellós.

Y aún así no es suficiente y merecemos más. Por eso el ministro Íñigo de la Serna anunció el pasado 30 de noviembre, en la Jornada Empresarial PortCastelló-Mediterráneo, que Fomento triplicará los trenes que unen Castellón con el Maestrat creando una nueva Obligación de Servicio Público. Los trenes que unen Castellón con Vinaròs pasarán de cuatro a doce.

Además, el ministro anunció el compromiso de financiar el 50% de los accesos sur al Puerto de Castellón, para que la Autoridad Portuaria pueda licitar las obras a finales de año. Pero no solo eso, el ministro anunció que Fomento abonará los nueve millones de euros del acceso en autovía a la dársena sur del puerto.

Los resultados son contundentes: hemos pasado del PSOE que eliminó el AVE y la N-232 para apostar por la ruina del Castor al PP, que entre la pasada legislatura y ésta licita más de 559 millones de euros para el futuro de la provincia Castellón. Efectivamente, obras son amores … e infraestructuras útiles para Castellón.

*Vicepresidente de la Diputación de Castellón