Nos dijeron que llegaría el AVE a Castellón en tiempo y forma y no llegó ni llegará. Porque como a los castellonenses siempre nos han considerado unos conformistas y ciudadanos de segunda, en lugar de construir una plataforma específica, como la tienen en el resto de ciudades donde se ha instalado, a nosotros se nos obligará a compartir la línea de cercanías con el AVE. “Quítese usted que ahora me toca pasar a mí”.

Que no siendo suficiente este desprecio absoluto hacia nuestra provincia y su turismo, ahora nos dicen que, posiblemente, será necesario suspender el servicio de Cercanías para acabar las obras este año.

Me veo al AVE haciendo de Cercanías para compensar. “Próxima parada Roca-Cúper, Próxima parada Nules-Vilavella”. Y es que, si la alta velocidad nos pondrá en Madrid en dos horas y media, este va a ser el tiempo del trayecto medio entre Castellón-Valencia y viceversa si cada vez que pasa el AVE los Cercanías tienen que apartarse a un lado para que pasen los ciudadanos madrileños que tienen más prisa y más dinero que los ciudadanos de segunda de Vila-real, Burriana, Nules, Almassora o Castellón que utilizan Cercanías para ir a trabajar o estudiar. Sí, ya sé que esto es demagogia barata de izquierdas, pero es que ni así reacciona la sociedad adormecida de Castellón, ni los complacientes empresarios, ni los sufridores trabajadores y estudiantes que no quieren ver lo que se nos viene encima. Una lástima, sí señor. H

*Abogado-Urbanista