Antes y después del verano, cada vez que hay lluvias intensas y suben las temperaturas podemos observar como alcaldes de todo signo político están descontentos por el procedimiento de la lucha contra las plagas. Algo curioso, pues Cs preguntó al equipo de Gobierno por escrito, y su respuesta fue que tan solo dos municipios habían notificado las fechas de tratamiento en su municipio, y solo otros tres se habían interesado por aspectos relativos a productos y formas de aplicación de los tratamientos. Según la Diputación, además, no han recibido la documentación de actuaciones de ningún consistorio durante el mes de agosto. Es decir, según el PP, no hay coordinación por culpa de los ayuntamientos.

Desde Cs pensamos que para luchar contra la plaga del mosquito tigre lo más importante es la prevención, y para conseguir una prevención efectiva, se necesita fundamentalmente de coordinación entre las administraciones. Nuestro clima hace que tengamos todas las papeletas para que el mosquito tigre se quede con nosotros. La UE, de hecho, ya ha calificado a España como el territorio del continente más afectado por este tipo de mosquito, y como la población más vulnerable a sus picaduras los recién nacidos, los mayores de 65 años y las personas con presión sanguínea alta, diabetes o problemas coronarios.

Así, las administraciones tienen que realizar un esfuerzo extra en cuanto a investigación, medios y ayudas económicas, siempre dentro de una verdadera coordinación porque los mosquitos no conocen de fronteras y, por tanto, los ayuntamientos, junto con la Diputación y el Consell, tienen que velar para que se cumplan los protocolos de actuación. Arrimando el hombro administrativo, concienciando a la ciudadanía de que ciertas conductas potencian su proliferación y colaborando entre todos será el único camino que nos llevará a solucionar el problema hoy y mañana. Mientras, seguiremos escuchando a alcaldes de todos los colores descontentos, a la Diputación echando balones fuera al tejado de los vecinos, al Consell denegando las fumigaciones aéreas y en nuestras casas, mosquitos que pican.

*Portavoz de Cs en la Diputación