El rostro del nacionalismo en la Comunitat Valenciana tiene un nombre y es el del Gobierno del Botànic. Y es que aunque Compromís lleve la voz cantante, tanto el PSPV como Podemos están haciéndoles los coros sin desafinar ni desafiar una sola nota. Ese Gobierno que venía a rescatar personas ha acabado siendo más de lo mismo, primando sus intereses frente al de los valencianos. Primando el enfrentamiento frente a la unión.

El último capítulo lo hemos vivido con el apoyo a los que se han saltado la ley y la democracia en Cataluña por parte de algunos dirigentes de Compromís, mientras el PSOE se ocultaba para no incomodar a sus compañeros de Gobierno.

Pero desde Ciudadanos no estamos dispuestos a mirar hacia otro lado. Por ello, les recomendamos que en lugar de acudir a concentraciones a favor de aquellos que quieren romper España, se den un paseo por los 1.800 barracones que aún quedan en la Comunitat; que en lugar de chantajear con el modelo plurilingüe, trabajen por promover un modelo inclusivo que garantice la autonomía de los centros y la competencia real; que en lugar de poner trabas a los autónomos y señalarles por el idioma que utilizan en sus comercios a través de una app, trabajen por facilitarles el empleo y rebajar la presión fiscal; que en lugar de aconsejar a los padres valencianizar los apellidos de sus hijos como ya hacía el PP, trabajen por mejorar la conciliación laboral. Eso es gobernar para las personas, para todas, no solo para las personas del Botànic.

Mientras el PP ha hecho la vista gorda a cambio de prebendas y el tripartito suena como un coro perfecto aupando el nacionalismo, en Cs les garantizo que, pese a quien le pese, seguiremos alzando la voz y siendo el único dique contra el contagio nacionalista en nuestra tierra.

*Diputada autonómica por Castellón y portavoz provincial de Ciudadanos