En ocasiones, la vida y las situaciones te dan una segunda oportunidad, y en este caso se la ha dado al Acord del Fadrell. La incapacidad de presentar unos presupuestos para el 2020 en tiempo y forma, es decir, a finales del 2019 o principios del 2020, les permite ahora la oportunidad de redimirse y aprovechar ahora la crisis de la covid-19 para reajustar esas cuentas en unas más sociales y económicas que nunca, enfocadas a paliar los efectos que está dejando y dejará en el futuro la pandemia de la covid-19 en la ciudad de Castellón.

La semana pasada, parte del equipo de gobierno insinuó la posibilidad de no presentar unos presupuestos para este año y trabajar con los prorrogados del 2019, posibilidad corroborada por la alcaldesa en una entrevista el domingo en este periódico y confirmada ayer mismo por el portavoz del PSOE a otro medio de comunicación.

Ahora, los miembros del Fadrell se excusan en que no hubiera servido de nada haber aprobado los presupuestos cuando tocaba porque se tendría que haber hecho modificaciones de cara a paliar los efectos negativos del coronavirus. La realidad es que los presupuestos más o menos trabajados, más o menos avanzados, fueron pospuestos por el Desacord del Fadrell generado por el cese de la Junta de Fiestas. La realidad es que llevamos cuatro meses del 2020 y estas cuentas siguen sin estar claras por mucho que los miembros del Fadrell intenten justificar. A día de hoy, la realidad es que ni hay presupuestos ni Plan de Respuesta de Emergencia para pymes y autónomos, solo anuncios y la economía local no se reactiva de titulares, sino de hechos y acciones.

Desde Ciudadanos pedimos al Fadrell lo mismo que nos exigen ellos, unidad y lealtad. Sabemos que esto es cosa de todos, por eso hemos pedido la revisión de los presupuestos, la aplicación de ese Plan de Respuesta inmediata, hemos presentado un decálogo… Porque lo entendimos a la primera. La teoría de la confrontación no es lo nuestro como algunos quieren vender pero la unidad y la lealtad también es exigencia, no sumisión, no reverencia.

*Portavoz de Cs en el Ayuntamiento de Castelló