Querido/a lector/a, desde hace un tiempo me empieza a preocupar todo lo que afecta a la situación del sistema sanitario público español. Posiblemente porque me hago mayor y parece que estoy más cerca de las medicinas y del hospital. Pero sobre todo, porque la sanidad pública, que es base del Estado de Bienestar y asunto de gran importancia, tiene un grave problema que le afecta a su eficacia y calidad asistencial.

La cuestión es que como consecuencia de mi preocupación por el Betadine y el esparadrapo, ahora me fijo mucho más en las noticias relacionadas con la salud y los hospitales. Así por ejemplo me he enterado de que en nuestra provincia no tenemos ninguna institución sanitaria pública entre las 100 primeras de España. O, por ejemplo también he leído que según denuncia la Sociedad Española de Medicina de Urgencia, hay falta de médicos de urgencia en nuestra provincia, incumpliendo recomendaciones del Ministerio de Sanidad. Pero no todo acaba ahí, los médicos gallegos salen en huelga, y seguramente con razón, porque dicen que en Galicia y a falta de médicos de urgencia, de familia y de pediatría, se esta matando la sanidad primaria. Al tiempo, los jóvenes médicos que se presentan al MIR, se lamentan de que mientras faltan médicos y los que existen envejecen, el número de plazas no se amplia.

Querido/a lector/a, seguramente aún podemos loar la bondad del sistema público sanitario español. Seguro que aún queda verdad en esas alabanzas, pero todo indica que por falta de dotación económica o porque aún no le han aportado lo que recortaron en la crisis, o por la mala financiación de las autonomías, lo estamos llevando al límite y esta perdiendo eficacia y calidad.

*Analista político