La primera imagen que evocan los padres de los estudiantes del instituto Eugeni Xammar de L’Ametlla del Vallès (Vallès Oriental) sobre el profesor C. S. es su vestimenta pintoresca y su aspecto “hasta cierto punto estrafalario”. Cuentan que es un docente peculiar por su imagen, “siempre de traje, con zapatillas deportivas y gabardina”, y por su carácter extrovertido. Como profesor de Francés y de otras asignaturas optativas (últimamente impartía Valores Éticos), solía ser quien acompañaba a los alumnos en sus salidas extraescolares.

En él es en quien pensaron muchos progenitores cuando el lunes se supo que unos agentes de paisano de los Mossos d’Esquadra habían acudido al centro para detener a un profesor como presunto autor de tres delitos de abusos sexuales a menores. “Había habladurías en torno a él, aunque nunca se le había señalado abiertamente”, afirmaba ayer una madre, a las puertas del centro.

La actuación policial se llevó a cabo después de que los Mossos recibieran una denuncia de la dirección del instituto público el miércoles 24 de febrero, a la que se sumaron, luego, las de las tres familias de las presuntas víctimas: dos chicos de 14 años y otro de 16 años. Denuncian que C.S. les tocó los genitales. El docente, vecino de Barcelona y de 58 años, quedó en libertad provisional con cargos, después de declarar el mismo lunes ante el juzgado de instrucción número 4 de Granollers, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya. En principio, el juez no ha impuesto al sospechoso ninguna medida cautelar, de acuerdo con el criterio del Ministerio Fiscal.

En este caso, la dirección del instituto comunicó los hechos, en cuanto recibió la primera queja de un alumno, a la Generalitat catalana. El profesor fue depuesto de su lugar de trabajo en menos de 48 horas. H