El dinero que las Administraciones Públicas destinan a educación en España se ha reducido en un 18,4% desde el 2010, un periodo --el de la crisis económica y las políticas de austeridad-- en el que, por el contrario, el número de estudiantes no ha dejado de crecer. La población estudiantil ha aumentado en un 6,5% en este tiempo. El gasto para la educación de los españoles (desde los párvulos hasta los adultos que siguen cursos de formación permanente) equivale al 4,31% del Producto Interior Bruto (PIB), lejos aún del 6% recomendado por organismos internacionales como la Unesco y del 7,2% que destinan países tan avanzados en esta materia como Finlandia.

Las cifras se desprenden de la Estadística del Gasto Público en Educación hecha pública hace unos días por el Gobierno, que habla de una inversión de 44.846 millones de euros en el 2014 (el último ejercicio contable disponible), lo que supone un recorte del 0,3% respecto al año anterior. Eso sí, si se excluyen los capítulos financieros, es decir las amortizaciones y la deuda que soportan las administraciones educativas, se produce un mínimo incremento del 0,1% en relación al 2013, precisa el Ministerio de Educación.

España destina actualmente a educación un 5,5% más que lo que gastaba en el 2006, sin tener en cuenta que, solo en escuelas, institutos y universidades, había en el 2014 un millón de alumnos más que ocho años antes.

El gasto destinado a formación de adultos, a programas compensatorios, a becas y ayudas, a la atención a la diversidad, se ha reducido a mínimos. La más castigada por el retroceso del gasto educativo en el 2014 fue la formación ocupacional (o reciclaje profesional), que experimentó un descenso del 12,5% respecto al año anterior en el conjunto de España. La situación es especialmente grave, si se tiene en cuenta que estos fondos han caído en picado desde el inicio de la crisis, cuando tendrían que haber servido para mejorar la capacitación profesional de los trabajadores.

Según datos del Ministerio, el 9,9% de la población de entre 25 y 65 años participó en el 2015 en alguna actividad de formación. De media, en la UE, el 10,7% de ese sector de población participó en actividades de formación. H