Los equipos de emergencia que llevan cuatro días combatiendo el incendio de La Palma lograron acotar ayer el frente menos potente del fuego, el que está situado al norte, para poder concentrar todos sus medios sobre las el frente sur, donde las llamas progresan “con más fuerza”. Diez medios aéreos y cerca de 300 efectivos de tierra trabajaban ayer en el incendio forestal de La Palma, que ya ha afectado 3.600 hectáreas y ha obligado a 2.500 personas a abandonar sus viviendas en los municipios de Fuencaliente y El Paso. Después de una noche complicada, debido al aumento de la intensidad del viento y de las temperaturas, ayer se presentó un escenario “más positivo del que se preveía”, señaló en el municipio de El Paso el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo. Este explicó que el frente norte mantiene dos zonas con fuego de 100 y 400 metros, respectivamente, pero no avanza, por lo que se espera que se pueda acotar en las próximas horas, lo que permitiría concentrar todos los medios en la zona sur hacia Fuencaliente, la que más preocupa en estos momentos.

COLABORACIÓN // La situación, sin ser optimista, es mejor de lo que se preveía gracias “al magnífico hacer” y la colaboración de los efectivos, insistió Clavijo.

El presidente canario pidió tranquilidad a la ciudadanía porque “grandes profesionales” están trabajando en las labores de extinción y subrayó que medidas como los desalojos están destinadas a proteger a las personas, a las viviendas y a extinguir el fuego.

Clavijo ofreció esta información tras guardar un minuto de silencio en recuerdo a Francisco Santana, el agente forestal de 54 años fallecido cuando trabajaba en la extinción del fuego.

En el homenaje que se le rindió también en Gran Canaria participaron dos hermanos del fallecido que, aunque residía en La Palma desde hace 20 años, era originario del municipio de Telde. H