El detenido por el asesinato de su hija de 4 años en Zaragoza, N. C. O., se negó a declarar ante el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Aragón. No obstante, según la abogada defensora, Carmen Sánchez Herrero, el sospechoso asegura que su hija era la reencarnación de su madre --abuela de la menor fallecida-- y que esta le había pedido que se la enviara. Para el infanticida, su hija está ahora «feliz con Dios». R. D.
