Una réplica del terremoto en el centro de Italia, mucho más intensa que el seísmo inicial, mantenía anoche al país en alerta. El nuevo movimiento sísmico fue de 6,2 grados en la escala de Richter.

A las 19.11 horas locales, un fuerte terremoto se dejó sentir por primera vez en el centro de Italia, incluida la capital, Roma. El epicentro del movimiento sísmico, de 5,4 grados en la escala de Richter, se ubicó cerca de Visso, provincia de Macerata, en la región de Las Marcas. Los primeros testimonios hablaban de escenas de miedo en el barrio del Trastevere de Roma, donde los ciudadanos salieron a las calles, sin que los daños fueran de extrema importancia. El movimiento de tierras se sintió en varios puntos del país, desde Roma, hasta L’Aquila, pasando por Perugia, Terni, Florencia, Nápoles y Caserta.

Los primeros testimonios explican que los ciudadanos tenían miedo de abandonar sus casas y los servicios de emergencia recibieron cientos de llamadas. La web del centro sismológico de Italia se colapsó. Igualmente, contactar por teléfono presentaba dificultades. En la región de Las Marcas, una de las más afectadas, se produjeron cortes en el suministro eléctrico.

Expertos en sismología aseguraron que el seísmo está vinculado con el que tuvo lugar el 24 de agosto en Amatrice, con un balance de 300 víctimas mortales. El primer ministro italiano, Matteo Renzi, seguía de cerca la evolución de la catástrofe. H