Fumar, además de perjudicar la salud, puede suponer un importante riesgo en carretera. Así lo demuestra un estudio reciente publicado en la revista Atención Primaria por un grupo de médicos de centros de salud de Zaragoza, que afirma que los conductores que fuman mientras conducen tienen el doble de riesgo de sufrir un accidente de tráfico que el resto de usuarios de la vía. Y es que, aunque fumar al volante no esté prohibido -recuerda que tirar las colillas por la ventana del coche sí que puede suponer una multa de hasta 200 euros y cuatro puntos del carné-, lo cierto es que inutiliza una de las manos, además de generar problema de visibilidad a casa del humo, lo que hace aumentar el riesgo de sufrir un accidente en carretera.

El estudio ha estado liderado por José M. Buñuel, quien ha explicado que “el objetivo principal era encontrar algún factor que influyera en los accidentes de tráfico”, ya que “aunque el hábito de fumar ha sido reconocido como factor de riesgo para tres de las principales causas de mortalidad (cáncer, accidente cerebrovascular y enfermedad cardíaca), se le ha prestado poca importancia como factor de riesgo en accidentes”. “Al ver los resultados del tabaco, nos sorprendimos”, pues el estudio señala que “los fumadores tienen de promedio más del doble de riesgo de sufrir accidentes de tráfico no fatales en comparación con los no fumadores”, ha añadido Buñuel.

De hecho, mientras los no fumadores cuentan con un 7% de riesgo de accidente, los fumadores oscilan entre el 11,6% -cuando no fuman mientras conducen- y el 16,7% -cuando fuman al volante-. En este sentido, las aseguradoras consideran que “al menos el 5% de los accidentes de tráfico son atribuibles a fumar en el vehículo”.

No obstante, aún no se puede afirmar con rotundidad que el tabaco provoque más accidentes de tráfico. Según Juan Carlos González, asesor médico de la Dirección General de Tráfico (DGT), “no se ha probado que el tabaco sea el responsable directo, sino que los fumadores suelen tener, a la vez otros factores, como beber alcohol, ser varones o tener una determinada edad, que sí tienen influencia en la seguridad vial”.