Las medidas «con demasiada rapidez» podría «causar un rápido resurgimiento de la transmisión», alerta Andrea Ammon, directora del Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC).

-Más de tres millones de infectados en todo el mundo y 216.000 muertos. ¿Qué es lo que más le preocupa?

-Hay interés en eliminar gradualmente las medidas porque son perjudiciales para la sociedad. Pero levantarlas demasiado rápido, sin vigilancia y la capacidad sanitaria adecuada, podría causar un resurgimiento repentino de la transmisión. Apoyamos un levantamiento prudente de algunas medidas.

-¿Ha subestimado la Unión Europea al virus?

-No estoy de acuerdo. Nos lo tomamos muy en serio y emitimos numerosas evaluaciones de expertos y advertencias, tan pronto como el 9 de enero. Nuestras evaluaciones se basan en hechos que conocemos en el momento de la publicación. En enero y febrero emitimos hasta 14 evaluaciones y actualizaciones.

-¿Por qué países como España e Italia ha sido tan golpeados por el virus?

-No comentamos medidas particulares adoptadas por los estados miembros. El primer caso detectado en Lombardía no tenía un vínculo epidemiológico claro con un caso confirmado, lo que apunta a que ya había cierta transmisión comunitaria. Los grupos iniciales detectados en Francia, Alemania y el Reino Unido sí tenían un vínculo epidemiológico claro, así que fue posible seguir, aislar y vigilar los contactos.

-Hay países que solo cuentan los casos positivos por test. Otros, también los sospechosos. ¿Las cifras están infravaloradas o sobrevaloradas?

-Estamos en conversaciones con los estados miembros para actualizar la definición para contar los casos y las muertes cuando la confirmación de laboratorio no está disponible, pero existe un cuadro clínico compatible con la infección por covid-19. Nos alineamos con la OMS, que incluye casos que no están confirmados.

-¿Deben ser obligatorias las mascarillas?

-Si uno está infectado el uso de mascarillas quirúrgicas podría reducir el riesgo de infectar a otros. Pero no hay evidencias de que eviten el contagio de forma efectiva. Es incluso posible que su uso pueda aumentar el riesgo de infección debido a una falsa sensación de seguridad y un mayor contacto entre las manos, la boca y los ojos mientras se usan. Las mascarillas deben complementar las cinco medidas básicas: lavarse las manos, estornudar en el codo o un pañuelo, mantener la distancia mínima de seguridad, quedarse en casa y no tocarse la boca, los ojos o la nariz.

-¿Hasta qué punto conocen el virus?

-El SARS-CoV-2 es una nueva cepa de coronavirus que no se había identificado previamente en humanos. Causa síntomas leves en muchas personas infectadas y existe una creciente evidencia de que también se puede transmitir en los 2 o 3 días anteriores a la aparición de los síntomas. Hay dudas sobre el efecto de la transmisión por personas no sintomáticas. Y las preguntas sobre la inmunidad aún están abiertas.