Tras las últimas dos semanas en las que el número de casos fuera de China se ha multiplicado por 13 y el de países afectados se ha triplicado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunció ayer que el coronavirus ya puede definirse como una «pandemia», según declaró su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, tras subrayar que hay más de 118.000 positivos en 114 países y que el número de muertes se sitúa en 4.291.

«Podemos esperar que el número de casos, de decesos y de países afectados aumente todavía más» en los próximos días y semanas, señaló, y agregó que la OMS «está profundamente preocupada por la alarmante expansión del virus, por su gravedad y por los niveles de inacción». El máximo responsable del organismo aseguró que la nueva definición «no cambiará» lo que están haciendo «y lo que los países deben hacer», en relación a que las estrategias deben seguir enfocadas más en la contención (para evitar nuevos casos) que en la mitigación de los existentes. «Esta pandemia no es solo una crisis de salud pública, afecta a todos los sectores, y todos los gobiernos y sociedades deben involucrarse en la lucha», afirmó el médico etíope.

EL DÉFICIT / Mientras tanto, el Gobierno italiano trata de amortiguar el impacto que tendrá el coronavirus en su débil crecimiento y ayer anunció ayudas de hasta 25.000 millones de euros, que suponen disparar el déficit para el 2020 hasta el 3,3% del producto interior bruto (PIB), una medida que ve necesaria, ya que los contagios siguen aumentando.

La UE no tardó en responder y, en la línea que viene manteniendo Bruselas en los últimos días, aseguró que aplicará «totalmente» la flexibilidad que contemplan sus normas de control fiscal. Según los últimos datos, el coronavirus ha causado ya 827 fallecidos en Italia, después de aumentar en 196 en solo 24 horas. Los contagios totales superan los 12.000, contando los positivos actuales (10.590), los curados (1.045) y los fallecidos. Las cifras siguieron creciendo el miércoles, especialmente en Lombardía, que registra 617 de los fallecimientos y más de 7.000 positivos.

Ante este panorama, el Gobierno italiano decidió el lunes restringir los movimientos en todo el país y suspender eventos deportivos y concentraciones públicas, además de cerrar centros educativos, museos, cines y teatros.

Las fronteras de Italia están abiertas. El problema es de qué manera entrar o salir. La suspensión de las conexiones aéreas con el país ha dejado a muchos españoles y otros extranjeros atrapados. La salida por carretera o tren tampoco es fácil por las restricciones impuestas a la movilidad.

CONSULTAS / Los consulados generales de España en Italia atendieron el martes las consultas de 5.000 españoles desplazados o residentes en el país atrapados a causa del coronavirus y de la prohibición de vuelos. Iberia y Vueling han suspendido sus líneas con Italia después de que el Gobierno español prohibiera los aterrizajes de los aviones procedentes del país. Moverse no es fácil. Para salir del municipio en el que resides te has de bajar un impreso de Interior, declarando por qué viajas. La mentira se paga con una multa de 226 euros, e incluso prisión de tres meses.