Los agentes de la Policía Local de Vila-real que se encontraban atendiendo un accidente de tráfico en la mañana de este martes se han convertido en los ángeles de la guarda para un conductor de 48 años, ajeno al siniestro que estaban cubriendo los policías, que entró en parada respiratoria.
Los hechos han ocurrido en la Carretera de Onda, cuando los policías locales han advertido que un hombre, dentro de su vehículo necesitaba ayuda. Rápidamente se han dirigido al automóvil y han comprobado que esta persona estaba entrando en parada cardiaca. Tras hacer uso del desfibrilador que la Policía Local de Vila-real ha instalado en los coches patrulla, los agentes han conseguido reanimar al hombre, que posteriormente ha sido trasladado al Hospital General Universitario de Castelló, sin que de momento se hayan dado datos sobre su estado.
Hay que recordar que hace un mes unos 40 agentes de la Policía Local de Vila-real se formaron en un curso de DESA (uso de desfibriladores automáticos), formación que esta vez ha logrado salvar la vida a una persona.
