La Audiencia de Alicante ha condenado a diez años de prisión a un hombre de 71 años por abusar sexualmente de manera continuada de su nieta carnal, cuando solo tenía 3 años, y de la hijastra de su hijo, de 6, con la que también se comportaba como si fuese su abuelo. El procesado permanecía en prisión preventiva en relación con estos hechos.

Los abusos considerados probados por la Audiencia de Alicante tuvieron lugar en varios episodios registrados a lo largo del 2011 y 2015, después de que el procesado acudiese a recoger a ambas menores en sus respectivos colegios y las llevase a su domicilio, situado en Benidorm.

Allí les practicaba tocamientos en sus genitales y conseguía que ellas también tocasen sus órganos sexuales, según el tribunal. No obstante, la Audiencia de Alicante considera que no se habría podido probar que en algún momento los abusos hubiesen derivado en una posible penetración por «vía vaginal, anal o bucal», ni que se produjese la introducción de objetos, al no existir evidencias físicas que lo corroborasen.

En cualquier caso, según el fallo, sí queda demostrado que «el acusado, ejerciendo su papel de abuelo, ostentaba una posición de predominio, evidentemente conocida por él, que la utilizaba para inhibir la eventual resistencia» de las menores. Además de la cárcel, la sentencia le impone el pago de 15.000 euros cada una de las víctimas.