Las personas de avanzada edad son, por norma general, víctimas de distintos hurtos al descuido y estafas. Entre otros, el timo de la estampita, el tocomocho, el robo de la asistenta y también el hurto por el método del abrazo cariñoso.

La Guardia Civil, en colaboración con la Policía Local de Benicàssim, ha detenido a dos vecinos de Barcelona, un hombre de 24 años y una mujer de 25, que intentaban robar joyas en Benicàssim por medio del conocido con el nombre del abrazo cariñoso.

Los agentes recibieron dos denuncias en el cuartel, por lo que dieron inicio a la denominada operación Hug. Tras numerosas gestiones, los investigadores lograron dar con los ladrones, que habían intentado hacerse con alhajas valoradas en más de 4.500 euros. Según confirmaron ayer desde la comandancia del instituto armado, los dos arrestados tenían numerosos antecedentes por hechos similares en el pasado.

Este tipo de delitos los cometen, por lo general, bandas organizadas compuestas por una o dos mujeres y algún hombre joven. El modus operandi de estos ladrones consiste en abordar a sus víctimas en la vía pública, personas mayores normalmente, y entretenerlas con algún tipo de excusa, buscando el contacto físico para el robo. Se fijan en las carteras, pero, sobre todo, en las joyas. Sobre todo, gargantillas y pulseras. Las quitan con gran habilidad y, con frecuencia, las víctimas tardan en darse cuenta de lo ocurrido. Otras veces, sin embargo, emplean la violencia al saberse descubiertos. H