Agentes de la Policía Nacional detuvieron ayer en Sagunt a una mujer de 66 años, de origen español, como presunta autora de los delitos de estafa, apropiación indebida y administración desleal, tras hacerse con poderes notariales para la administración de las cuentas de una amiga de 90 años e incluirse en el testamento. La ahora detenida habría estado extrayendo grandes cantidades de dinero, logrando un botín de 110.000 euros en un año, y con parte de estos compró un coche al contado valorado en 13.000 euros, según informaron fuentes policiales.

Además, al parecer se quedó con varias joyas que su amiga le había entregado para guardarlas. Los agentes han logrado recuperar 67.000 euros y, según fuentes policiales, parte del dinero estaba oculto en tres paquetes en la tierra de una maceta en la terraza de la casa de la ahora detenida. Las investigaciones se iniciaron la tener conocimiento los agentes que un familiar había detectado la falta de dinero no justificado de la cuenta bancaria de su familiar, una anciana de 90 años.

Los policías averiguaron que la anciana había sido ingresada en un centro de mayores por una amiga suya, y cuidadora altruista, ya que no estaba contratada por parte de su amiga. La mujer de 90 años había sido operada en un hospital y la detenida aprovechó el ingreso en el centro sanitario para, a través de poderes notariales, convertirse en la administradora de la cuenta bancaria además de incluirse en el testamento de la víctima. La sospechosa obtuvo, de esta forma, una tarjeta vinculada a dicha cuenta bancaria propiedad de la estafada de la que extraía, habitualmente, grandes cantidades de dinero, sin persmiso, y se habría quedado con varias joyas de gran valor que la anciana le había entregado para su custodia.

La detenida, que no cuenta con antecedentes policiales, pasó ayer a disposición judicial.