El acusado de intentar matar a un joven, propinándole múltiples puñaladas, a la salida de una discoteca del polígono Castalia en diciembre del pasado año; se enfrenta a nueve años de cárcel por un presunto delito de homicidio en grado de tentativa. Esa es la petición de prisión que realiza la Fiscalía para L.M.P., de 35 años, que se sentará en el banquillo de los acusados el próximo día 28.

Tal y como publicó Mediterráneo entonces, el agresor ingresó en prisión provisional, tras ser detenido gracias a la colaboración de la Policía Nacional y la Policía Local de Castellón.

Los hechos sucedieron sobre las 4.00 horas, cuando, por motivos que se desconocen, L.M.P. propinó un puñetazo al coche de la víctima, que estaba aparcado en las inmediaciones del local de ocio. Ello provocó que se iniciara una discusión entre ambos, que acabó en forcejeo y en el que intervinieron terceras personas para mediar. Sin embargo, dos horas después, sobre las 6.00, el agresor se dirigió a la víctima, que estaba de espaldas.

L.M.P. se fue hacia él y, con un objeto punzante que no ha podido ser localizado, le asestó, presuntamente, varias puñaladas en la zona del abdomen, «sin importarle las consecuencias de sus actos», según relata el fiscal en su escrito de acusación provisional.

El herido quedó tendido en el suelo, con heridas por arma blanca que sangraban abundantemente. Mientras esperaban a los servicios sanitarios, los agentes de la Policía Nacional, alertados a través del 091, aplicaron los primeros auxilios para evitar que la víctima se desangrase.

CRÍTICO / La ambulancia lo trasladó al Hospital General, donde ingresó en estado crítico, teniendo que ser intervenido quirúrgicamente de urgencia. Tras la operación y cinco días de ingreso hospitalario, pudo salir adelante, quedándole como secuelas la extirpación de la vesícula y varias cicatrices por las cuchilladas.

El fiscal propone que, además de la pena de prisión solicitada, el procesado indemnice con 15.000 euros a la víctima por las secuelas y con otros 2.680 euros por los días que tardó en curarse, un total de 43 (38 de ellos impeditivos). El Ministerio Público ha solicitado, asimismo, una orden de alejamiento por tiempo de ocho años, una vez cumplida la pena de cárcel. Asimismo, sugiere que se le imponga la medida de cinco años de libertad vigilada, ya que además el susodicho tenía antecedentes por violencia de género y coacciones. H