El joven de 20 años y nacionalidad española detenido tras rajar la cara a otro chico a la salida de una discoteca en Castellón podría enfrentarse a una pena de cinco años de cárcel por un presunto delito agravado de lesiones --al haber empleado un arma blanca para acuchillarlo--. Así lo señalan fuentes judiciales a este diario tras conocerse la brutal agresión en las inmediaciones de un local de ocio nocturno situado en la calle Lagasca.

La víctima recibió 23 puntos de sutura desde la frente a la barbilla y ha estado a punto de perder el ojo izquierdo. El afectado todavía no ha sido reconocido por el forense que debe determinar, a nivel penal, la gravedad de las lesiones. En una entrevista concedida a este diario el joven declaró que, inmediatamente después de ser acuchillado, solo podía «ver sangre» por toda su cara y se tiró al suelo «al no saber qué era lo que había ocurrido», recordaba.

El agresor --cometió el acuchillamiento ante su hermano-- se dio a la fuga y acabó entregándose en la comisaría de la Policía Nacional de Castellón horas después. Tras prestar declaración, fue puesto en libertad con cargos.

La familia de la víctima califica los hechos como «un intento de homicidio» por la delicada zona de las lesiones, que han obligado a intervenir al afectado en tres ocasiones.

Según la denuncia de la víctima, el detenido lo esperó a la salida del establecimiento y le atacó de forma repentina y sin mediar palabra. Por ahora todo apunta a un ataque de celos por una chica.