Un bebé de 14 meses falleció en la madrugada del viernes al sábado en el Hospital Valdecilla de Santander, adonde fue trasladado horas antes en estado grave tras caer desde el balcón de su domicilio, en un segundo piso de un edificio de viviendas en la localidad cántabra de Ampuero.
El Servicio Cántabro de Salud confirmó el fallecimiento del bebé, que ingresó con pronóstico grave en la unidad de cuidados intensivos pediátricos.
La Guardia Civil, que recibió el aviso del suceso a las 20.50 horas del viernes, informó en un primer momento de que la hipótesis principal sopesa que la caída se produjo de forma accidental y explicó que la Policía Judicial de la Benemárita está instruyendo diligencias en esa dirección.
«CAÍDA FORTUITA» // Una teoría que también comparte el alcalde del municipio, Patricio Martínez, quien hizo llegar las condolencias del Ayuntamiento y de toda la localidad a la familia, de origen sudamerciano. «Se trata simplemente de una caída fortuita y desgraciada, no se piensa en otra cuestión», explicó el primer edil.
«Es una desgracia, algo que cala muy profundo en el pueblo», insistió el alcalde, que agregó que el cuerpo será incinerado después de que se haya realizado la autopsia previamente.
El suceso trascendió la noche del viernes a través de un tuit del 061, que informaba de que un bebé había resultado herido grave tras precipitarse de forma accidental desde un segundo piso de una vivienda de Ampuero.
Los servicios de emergencias del 061 y de atención primaria de Laredo le practicaron repetidamente maniobras de reanimación en el lugar del suceso antes de trasladar al bebé a Valdecilla, donde murió a las 3.30 horas.
Al domicilio familiar también acudieron, además de agentes de la Guardia Civil, efectivos de la Policía Local y apoyo psicosocial de Cruz Roja. Se desconoce si los padres estaban en la vivienda en el momento de los hechos.
