El Juzgado de Instrucción número 3 de Vila-real ha enviado a prisión a un fugitivo de la justicia, de origen rumano y de 33 años, que tenía pendiente su entrada en prisión por una condena de robo con violencia del Juzgado de lo Penal número 1 de Castellón.

No fue, sin embargo, este hecho lo que permitió su detención. Y es que hace cuatro meses aproximadamente, la pareja sentimental del delincuente, vecino de Burriana, lo denunció por presuntos malos tratos. La mujer pidió ayuda tras sufrir lesiones importantes y recibió protección policial, así como también una orden de alejamiento. Ha sido ahora cuando la Guardia Civil ha logrado detenerlo y llevarlo ante la autoridad judicial, que ha ordenado su ingreso en la cárcel de Castellón I.

Otro fugitivo decidió este martes, como publicó ayer Mediterráneo, entregarse en la tenencia de alcaldía del Grao y confesar a la Policía Local que había cometido un crimen hacía cinco años. Los agentes comprobaron los datos del susodicho, de 28 años, y vieron que, efectivamente, tenía una orden de ingreso en prisión de un juzgado de Badalona por un delito de homicidio.