María Villar Galaz, sobrina del presidente de la Federación Española de Fútbol, Ángel María Villar, fue hallada sin vida el pasado 15 de septiembre en un riachuelo, atada de pies y manos, y con una bolsa en la cabeza que le causó la muerte por asfixia, según ha confirmado el subprocurador del Estado de México, Germán García, en unas declaraciones recogidas por la agencia Efe.

Ese día, “en una comunidad llamada Mirasol, en el municipio de Santiago Tianguistenco, aparece una mujer, que no estaba identificada, de 35 ó 40 años”, concretamente “en un canal de aguas residuales, esposada en las manos, encadenada de los pies, y con una bolsa en la cabeza, ya fallecida”, detalló el subprocurador.

García reveló que hasta el pasado martes no supo que se trataba de un secuestro, cuando el marido de María Villar y otro familiar cercano identificaron el cadáver en el Servicio Médico Forense (Semefo) de la Procuradoría (Fiscalía) del Estado de México.

Villar Galaz fue secuestrada tras tomar un taxi el 13 de septiembre, en el centro comercial de la zona capitalina de Santa Fe, frente a las oficinas de IBM México, donde trabajaba, y su muerte se produjo un día después, según los estudios periciales.

Las autoridades mexicanas entregaron ayer el cuerpo de la fallecida a sus familiares para que procedan a su repatriación a España. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, afirmó que “es un hecho dramático” y explicó que cuando tuvieron conocimiento del secuestro enviaron a México a dos policías especializados en este tipo de delitos. H