Un hombre de nacionalidad española y 36 años de edad se enfrenta a una investigación por un delito contra la seguridad vial, después de haber empotrado su vehículo contra el murete de una rotonda, en la avenida Valencia, cuando triplicaba la tasa permitida de alcoholemia.

Así lo comunicaron ayer fuentes de la Policía Local de Castellón, que relataron cómo el suceso se produjo por la mañana, en la rotonda sobre la autovía CS-22 en dirección al puerto, donde «por causas que está investigando el equipo de Atestados, un turismo marca Opel Astra de color rojo se salió de la calzada al acceder al interior de la glorieta».

Un testigo del siniestro notificó los hechos al Centro Integral Municipal de Seguridad y Emergencias 092, desde donde se dio traslado a una patrulla de la Policía Local que se personó en el lugar. Allí, comprobaron el estado en el que había quedado el coche e identificaron al conductor.

El implicado (J.J.C.C.), que según la policía no presentaba ninguna lesión, evidenciaba claros síntomas de embriaguez, por lo que fue sometido a la prueba de alcoholemia, ofreciendo un resultado tres veces superior al permitido por la ley, de ahí que los agentes de la Policía Local iniciaran la pertinente investigación ante la presunta comisión de un delito contra la seguridad vial.

A lo largo del 2018 hasta en 84 accidentes al menos un implicado conducía alcoholizado.