Cinco adonis --con torsos de espots de perfume de lujo-- se desnudan contoneándose a ritmo de Let’s dance ante una emocionada señora de mediana edad en un oscuro antro de Fuengirola. Bienvenidos a Infierno, disco-tugurio con fachada al Mediterráneo donde se rueda una escena de estriptís de Toy Boy, nueva serie de Antena 3 en la que la cadena apuesta por un thriller erótico, un combinación poco habitual en la ficción española.

Un exfutbolista reconvertido en actor (Jesús Mosquera), una actriz consagrada en la telecomedia La que se avecina (Cristina Castaño) y una joven promesa que ha asentado su fulgurante carrera en una casa de papel (María Pedraza) conforman el trío protagonista de este Toy Boy, un proyecto arriesgado por el fondo y la forma, pero que llega avalado por Plano a Plano, productora que ha demostrado su buen ojo en la comedia (Allí abajo), la intriga (La verdad) y el drama policíaco (El Príncipe).

En la escena del antro, el quinteto monta una coreografía de apenas minuto y medio, sencillita pero sensual, con el eléctrico apoyo vocal de David Bowie. Una cámara montada en una grúa con un brazo obscenamente largo se acerca a flor de piel de los tersos estrípers iluminados a golpes de flash (tan cutre como casi todos los shows de estriptís). Ya se verá hasta dónde llegará la cámara en una serie que se emitirá en abierto.