Aunque conocido por personajes pesarosos como el programador protagonista de 'Ex_Machina', el Jim Farrell de 'Brooklyn' o el General Hux de 'Star Wars', Domhnall Gleeson también es un actor experimentado y diestro en comedia, como vuelve a demostrar en 'Run', esperado estreno de HBO este lunes, día 13. Hablamos con el hijo del gran Brendan Gleeson sobre cuarentena, sueños de escapismo y su reunión con Phoebe Waller-Bridge.

-'Run' es una serie sobre dos antiguos amantes [Gleeson y la maravillosa Merritt Wever] que dejan sus vidas para salir huyendo juntos. ¿Cómo se siente contándonos esta historia cuando ninguno podemos poner un pie en la calle?

-Es una circunstancia curiosa, no voy a negarlo. Una serie sobre un viaje excitante… ¡que ninguno podéis pensar en hacer! Por otro lado, queda un consuelo: en 'Run' demostramos que dejarlo todo y salir corriendo puede no ser algo tan glamuroso y resultar, en cambio, algo muy complicado.

-¿Cómo lleva usted la cuarentena?

-Me dijeron que podía ser un periodo productivo, pero no ha sido así en mi caso (risas). He leído un poco, no mucho. He mirado Internet mucho. He jugado a videojuegos. Y he hablado con algunos amigos más que quizá en todo el resto de nuestra amistad. ¿Qué más? Ah, sí, he estado leyendo una obra teatral que quiero hacer. Pero, sobre todo, están siendo muchas horas de no hacer nada.

-Ya había colaborado con Phoebe Waller-Bridge en la película 'Adiós Christopher Robin', en la que ambos actuaron. ¿Dijo sí a 'Run' porque producía ella?

-No se puede desestimar la presencia de Phoebe en el equipo, pero, sobre todo, esta es la serie de Vicky Jones [su creadora], y fue así desde el principio. Son bastante inseparables, eso es cierto. Cuando las ves trabajar juntas, es evidente en todo momento que se conocen desde siempre y se adoran mutuamente.

-Vicky Jones trabajó como editora de guiones en la primera temporada de 'Fleabag'. ¿Diría que las series comparten una cierta sensibilidad cómica?

-Para mí la mayor conexión son los personajes. En 'Run', como en 'Fleabag', nos topamos con un par de antihéroes bastante complicados, gente adulta que evita como puede sus mayores problemas en lugar de enfrentarse a ellos.

-¿Se identifica usted con ese personaje que huye de la responsabilidad?

-Es fácil identificarse, diría. Todos hemos pasado por algún momento de crisis en el que hemos querido dejarlo todo. O hemos pasado por alguna ruptura y pensado en las que vinieron antes, imaginando, quizás, cómo sería volver a ver a alguna de esas novias. Es una idea muy potente. No es solo nostalgia por dicha persona, sino también nostalgia por la persona que tú eras al lado de ella.

-Los diálogos, sobre todo en el primer episodio, son veloces, ácidos e ingeniosos. No sé si habló con Jones, o quizá Wever, sobre antiguas comedias románticas de los 30 y 40; 'Run' tiene algo de esa misma energía.

-Una de mis películas favoritas es 'Perdición', de 1944. Sin ser comedia romántica, tiene ese toma y daca constante en los diálogos. Ver algo así es electrizante. Pero no hablé de ella ni otras películas así con Vicky ni Merritt. Solo buscamos el modo de hacer los diálogos tan veloces como fuera posible, a la vez que claros y transparentes. Tratar de adelantarnos al espectador y sus expectativas, pero sin llegar a lo atropellado.

-Al principio de su carrera, escribió y dirigió varios cortos. ¿Cuándo cumplirá su viejo sueño de dirigir una película?

-Espero llegar a hacerlo algún día. Pero la verdad es que ahora mismo estoy disfrutando de la interpretación. Por otro lado, estoy a punto de empezar a escribir una serie de comedia con mi hermano Brian y mi amigo Michael Maloney.

-Suele colaborar a menudo con su familia. Ha trabajado con su padre en el teatro y algún corto. ¿Lo considera su mentor, su gran maestro?

-Mi padre ha sido una gran influencia, tanto en la vida como en el trabajo. Curiosamente, trabajamos de formas muy diferentes; tenemos enfoques distintos en cuanto a cómo averiguar lo que un personaje y un proyecto necesitan. Es una persona fantástica con la que trabajar; eso puedo decirlo.

-¿Hacia dónde correría usted?

-Hacia muchos lugares. Adoro Japón, donde pasé dos semanas hace un tiempo. También hice un viaje en tren a través de Estados Unidos cuando era más joven, y me encantaría repetirlo. Por otro lado, están esos lugares donde nunca he estado y que me gustaría visitar, como Islandia, Hawái… Pero prefiero no pensar mucho en ello. ¡Google Maps no es la forma más sana de pasar el rato ahora mismo!