Josetxo Pérez vivió el domingo una de las finales más reñidas de la historia de Masterchef júnior, pero finalmente, como arriesgó con esferificaciones y técnicas de esas complicadísimas que aprendió en el concurso con solo 11 años (ahora tiene 12), se ha convertido en el sexto ganador del talent en su versión mini de TVE-1. Los nervios que mostraba cuando cocinaba a solas se convertían en decisión cuando capitaneaba equipos y, al final, logró convencer hasta al mismísimo Joan Roca. Aunque para él el mayor orgullo era devolverle a su padre, el periodista de la Cope José Luis Pérez, el haberle contagiado su enorme pasión por la cocina.

Josetxo y Paula acudieron a una batalla final muy igualada, tal y como aseguraron los jueces: «Es un día para tener dos trofeos». Los dos pequeños tuvieron que elaborar un menú libre de entrante, plato principal y postre en 120 minutos. Ella realizó unos platos de inspiración en los tres chefs (Pepe, Jordi y Samantha). Él presentó tres platos «arriesgados, originales e impecables» que le llevaron al triunfo.