La Generalitat explora todas las fórmulas para autorizar la celebración del Arenal Sound en Burriana, previsto del 2 al 7 de agosto, después de que el Ayuntamiento haya decidido denegar los permisos, pese a que fueron los propios técnicos municipales los que plantearon como alternativa ubicar el recinto de conciertos en Jardines de la Malvarrosa.

La situación de incertidumbre es tal que hasta el propio president de la Generalitat, Ximo Puig, intervino ayer para intentar buscar una solución que autorice la celebración del evento musical más importante del panorama nacional. El jefe del Consell ha encargado al portavoz del PSPV-PSOE en la Diputación, José Benlloch; al secretario autonómico de Turismo, Francesc Colomer; al director general de Administraciones Públicas, Toni Such; y al delegado territorial de la Generalitat en la provincia, Adolf Sanmartín, que estudien todas las vías posibles para resolver este problema. Una de las opciones que está encima de la mesa y que permitiría, en principio, autorizar el Arenal pasa por declarar el festival de interés general, como se propuso en la reunión a tres bandas que ayer volvieron a mantener el Consell, la organización y el Ayuntamiento de Burriana.

Estos encuentros está previsto que se sucedan en los próximos días. Y es que los técnicos autonómicos están estudiando si es posible autorizar el evento atendiendo a una disposición adicional de la ley que regula los espectáculos públicos, actividades recreativas y establecimientos públicos declarados de interés general. Por tanto, los permisos para celebrar el certamen dependerían directamente del Gobierno autonómico y no del consistorio. Con esta declaración de interés general, se priman las medidas de seguridad, pero se excluyen las cuestiones acústicas y, por lo tanto, el festival tendría vía libre.

montaje // De manera paralela a las negociaciones, Arenal Sound sigue adelante con las tareas de montaje. Ayer se pudo ver a varios operarios instalando las telas de sombra del cámping de Malvarrosa bajo las cuales acamparán entre 30.000 y 35.000 sounders.

En el Beach Club, la piscina ya está limpia y se ha aplanado el terreno y se ha colocado la cubierta de madera sobre la que bailan los asistentes al ritmo de la música de los pinchadiscos. H