La ininterrumpida espiral de aumento del desempleo que han vivido las personas con discapacidad en los últimos años se frena definitivamente. La contratación laboral en Castellón y en la Comunitat Valenciana ha marcado en el 2015 máximos históricos. Los datos oficiales del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) revelan que durante el último año los discapacitados firmaron en la provincia 691 vínculos laborales, un 50% más que los 459 registrados durante el 2014. En el conjunto del territorio valenciano, los contratos sumaron 8.753.
La Fundación Adecco achaca el incremento (en España el alza fue del 15% hasta los 95.238 contratos) a un efecto rebote. “Los discapacitados fueron un sector de la población especialmente afectado por la crisis y por la destrucción de empleo. Tradicionalmente ocupaban puestos menos estables y fueron los primeros en perder su ocupación, encontrando muy difícil recolocarse, especialmente en discapacidades de tipo intelectual que, en tiempos de bonanza económica, sí encontraban trabajo por un erróneo efecto de filantropía empresarial. Y, por este motivo, con la reactivación del mercado laboral la contratación de personas con discapacidad supera la media”, argumentan desde la Fundación.
Pese a que nadie pone en duda que los datos del 2015 son mucho mejores que los de años anteriores, los colectivos de discapacitados insisten en que son claramente insuficientes. “En materia de empleo queda mucho por hacer, sobre todo si se tiene en cuenta que el 70% de los discapacitados de Castellón en edad laboral no trabaja. Es un tema no resuelto”, destaca Carlos Laguna, presidente de Cocemfe Castellón.
Y las estadísticas le dan la razón. La tasa de paro entre las personas con discapacidad todavía es del 32,2%, mientras que la de empleo, pese a la mejora del último año, aún no llega al 26%.
2% EN LAS ‘MACROEMPRESAS’ // Por ley las empresas de más de 50 trabajadores (unas 350 en Castellón) están obligadas a que al menos el 2% de su plantilla sea personal con discapacidad, pero la norma a menudo se incumple. El INE recoge que, a nivel nacional, entre estas empresas el porcentaje es actualmente del 2,3%, pero en esta estadística también computan empresas que se dedican a insertar a personas con discapacidad, lo que distorsiona el dato. Se estima que más del 80% de las empresas no cumple la ley del 2% y aplica otras medidas sustitutorias como las donaciones a entidades sin ánimo de lucro cuyo fin sea la formación profesional, la inserción laboral o la creación de empleo en favor de las personas con discapacidad.
Dentro de las personas con discapacidad también hay diferentes clases: mientras la tasa de empleo en el total del colectivo es del 25,7%, entre los que sufren una enfermedad mental es del 15,8%, y del 11,9% entre los que tienen un grado de discapacidad de más del 75%. H
