El líder de la banda U2, su guitarrista y su bajista asistieron en la noche del jueves a una fiesta privada en un local de Valencia donde pidieron degustar cervezas nacionales y escuchar música que no fuera la suya pese a los gustos musicales de los responsables del pub, que no podían creerse estar ante sus ídolos. Así lo relató el propietario de Jockey, David Núñez, quien aún no sale de su asombro tras la experiencia, cuando los tres miembros del grupo irlandés de rock más famoso del mundo aparecieron por su local pasadas las 22.00 horas.

Era una fiesta privada en la terraza del restaurante-club con motivo de una boda y sus organizadores habían adelantado que iban a acudir a ella “personas importantes”, sin especificar más detalles. “¡Y de repente nos dimos cuenta de que eran ellos!”, señaló Núñez en alusión a Bono, The Edge y Adam Clayton --el batería Larry Mullen fue el único miembro del grupo que faltó a la cita--.

Estuvieron, relató el propietario, relajados, “campechanos y muy simpáticos”, y pidieron probar cervezas nacionales durante las cerca de dos horas y media que duró la fiesta, así como que no sonaran canciones de su extenso y famoso repertorio.

Al parecer, Bono es amigo del novio que contrae matrimonio con una valenciana en un lugar y una fecha desconocidos.

“Estamos aún alucinados”, reconoció Núñez, quien destacó la naturalidad con que se desarrolló la fiesta privada y el comportamiento de estas estrellas mundiales del rock, que actualmente no se encuentran inmersos en gira alguna. Los tres miembros de U2 se dejaron fotografiar con él y con otro de sus socios (Juan Albert), y apenas con un par de personas más que pasaban por la calle cuando finalizó la fiesta y les reconocieron al pasar junto a ellos ante este local de moda, situado en pleno centro de la ciudad, en la avenida del Reino.

Se da la circunstancia de que el grupo irlandés nunca ha actuado, en sus 36 años de vida, por tierras valencianas, pese a los infructuosos intentos hace unos años del entonces presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus --batería en sus ratos libres y reconocido aficionado de U2--, de ficharlos para un concierto. H