La concejala de Proximidad y Administración Local, Sabina Escrig, presentó ayer el díptico U més de la família, con el que el Ayuntamiento pretende mejorar la información sobre la ordenanza de convivencia ciudadana y sensibilizar acerca de los derechos y deberes de los propietarios de perros.

Entre la información que contiene el díptico, destaca la obligación de los dueños de inscribir a las mascotas en el censo del consistorio, trámite que según Escrig es complementario a la inscripción en el Registro Informático Valenciano de Identificación Animal (RIVIA), de ámbito autonómico.

El objetivo de la concejala es actualizar la estadística municipal para mejorar la atención y el servicio que se ofrece a los perros y a sus propietarios. La edila indicó que, según los datos que maneja el equipo de gobierno, en la localidad existen unos 3.000 canes, aunque añadió que “hay que actualizar esta información para asegurar un mejor control de los animales”. Se trata de una gestión gratuita que se puede hacer en las instalaciones municipales.

Escrig también anunció que en el centro del parque canino de la avenida Francesc Tàrrega, acabado de inaugurar, se instalará una pérgola y unos bancos que garantizarán sombra a los usuarios, y que como novedad este equipamiento tiene una doble puerta para evitar que los perros se escapen. H